La farsa interminable

Los peritos de Gendarmería fueron lapidarios: los casi 60 millones de dólares virtuales que Bacchiani mostró en la Policía Federal podrían ser parte de una nueva patraña para acceder a la prisión domiciliaria. Crece la tensión entre los inversores defraudados, que casi se trenzan a golpes en las puertas del Juzgado Federal.

El informe de los peritos de Gendarmería Nacional sobre la exhibición que hizo Edgar Adhemar Bacchiani de sus cuentas virtuales es lapidario: sin una investigación profunda o la buena voluntad de la empresa Binance para suministrar la información, es imposible establecer si el reo puede disponer de los casi 60 millones expuestos en la Policía Federal, mucho menos el origen de los fondos y sus movimientos. Ni siquiera está garantizado que el dinero continúe en la cuenta innominada que mostró en caso de que le otorguen la domiciliaria y quiera empezar a pagar, como promete.

“No es posible dar fe de que al momento de que se realice de nuevo la apertura de sus cuentas los fondos se encuentren alojados dentro de sus wallets por múltiples factores –consignaron los peritos-, ya sea porque el imputado podría tener las credenciales de sus cuentas compartidas con terceros, lo cual les permitiría mover los mismos cuando ellos quisieran; o quizás simplemente Binance podría bloquear sus fondos, como ya pasó en el fallido intento de verificación en el pasado mes de mayo”.

Mientras la madeja judicial se enmaraña, el financista y su defensa lograron exacerbar el malestar de los inversores defraudados, que salieron de nuevo a la calle para presionar por la libertad del preso

Sobre la titularidad de la cuenta, recomiendan se oficie a Binance para que informe sobre el nombre de usuario observado en las imágenes, ya que “se puede modificar fácilmente”.

Bacchiani solo mostró:

  • Una captura de pantalla con “un código QR, que sería la billetera Trust Wallet”, en la que se ve el importe “58711717 USDT=$58.715.522, 91”.
  • “Vista de lo que posiblemente sea una aplicación de celular, la misma sería de la empresa Binance”.

Los peritos destacan incongruencias en los montos reflejados en la cuenta “trust wallet” que Bacchiani se adjudica y el “balance total” de la wallet “Futuros”, y desacreditan las explicaciones que ensayó el “trader” para justificarla. Para ellos, ambas cifras deberían ser “idénticas” y Bacchiani miente.

El informe ya fue elevado al juez federal Miguel Contreras, quien debe definir si otorga o no la prisión domiciliaria que Bacchiani solicita.

Para sumar confusión, la defensa de Bacchiani –Luciano Rojas se sumó a Lucas Retamozo- introdujo otro planteo por la domiciliaria en el fuero provincial, hacia donde el Federal derivó la investigación por estafa y asociación ilícita.

Mientras la madeja judicial se enmaraña, el financista y su defensa lograron exacerbar el malestar de los inversores defraudados, que salieron de nuevo a la calle para presionar por la libertad del preso.

Varios de ellos casi se trenzan a golpes en las puertas del Juzgado Federal por diferencias en lo que hace a las prioridades en el orden para los eventuales cobros, o discusiones por la presencia de presuntos acreedores que ya habrían cobrado.

 

Ver también en El Estaño

https://elestanio.com.ar/el-trader-god-mezquina-los-naipes/

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