A dos meses y medio de iniciar el expediente Bacchiani, admitió la competencia provincial para los delitos de estafa y asociación ilícita que planteó en abril la fiscal de Delitos Complejos de Córdoba, Valeria Rissi. Y adoptó el criterio de su colega y subrogante Sebastián Argibay en el caso de RT Inversiones.
78 días después de haber arrestado e imputado a Edgar Bacchiani y la línea ejecutiva de “Adhemar Capital”, el juez federal Miguel Contreras se rindió al criterio de la fiscal de Delitos Complejos de Córdoba, Valeria Rissi, y declinó la competencia para estafas y asociación ilícita en la Justicia provincial de Catamarca, al tiempo que procesó al “Trader God” y cinco de sus supuestos cómplices solo por “intermediación financiera no autorizada”, igual que hizo su colega y subrogante Sebastián Argibay en el caso de RT Inversiones. El lavado de activos quedó fuera del radar.
La pelea entre el fuero federal catamarqueño y Rissi por el control del expediente Bacchiani estalló rabiosa el 22 de abril, cuando Contreras ordenó detener al financista y sus ejecutivos al mismo tiempo que iba a ejecutarse la detención requerida por la fiscal, que avanzaba en Córdoba desde febrero en una investigación por estafas reiteradas perpetradas en la sede que “Adhemar Capital” había abierto en esa provincia.
El juez Contreras consiguió quedarse con los presos, pero Rissi se llevó el producto de los allanamientos practicados en la casa matriz catamarqueña y el domicilio del “trader”, a pesar de que el Juzgado Federal habría intentado impedirlos.
El cruce abrió un escándalo en el que la corporación judicial cordobesa en bloque respaldó a Rissi. El presidente del Superior Tribunal de Justicia de Córdoba, Sebastián López Peña, elevó quejas al Consejo de la Magistratura y la Procuraduría General de la Nación por supuestas maniobras desplegadas por los federales para obstaculizar el trabajo de la fiscal.
El conflicto de competencia está en la Corte Suprema, pero el procesamiento de Contreras lo deja sin materia y el camino queda expedito para Rissi. Vale decir: los damnificados cordobeses están más cerca de obtener algún tipo de resarcimiento que los catamarqueños.
El conflicto de competencia está en la Corte Suprema, pero el procesamiento de Contreras lo deja sin materia y el camino queda expedito para Rissi. Vale decir: los damnificados cordobeses están más cerca de obtener algún tipo de resarcimiento que los catamarqueños
Long y Short
Desde que Contreras detuvo e imputó a la banda Bacchiani, el desarrollo de su expediente se demoró enredado en tratar de determinar si el “trader” contaba con recursos para pagar sus deudas, ajustado a una línea de defensa diseñada por el abogado Lucas «Morla» Retamozo que contó con el respaldo su colega, el querellante Alfredo Aydar: sistemáticas ampliaciones de indagatoria en las que el encartado condicionaba el cumplimiento de sus compromisos a que lo beneficiaran con la prisión domiciliaria.
La asociación entre defensor y querellante había asomado ya en el principio de la disputa entre Contreras y Rissi, cuando ambos hicieron presentaciones “mellizas” para pedir que el federal procurara retener la competencia, idénticas hasta en los errores de tipeo y con ácidas críticas a la intervención de la cordobesa.
La popular bautizó al dúo “Long y Short”, en alusión a la estrategia que Bacchiani había asegurado que implementaría en el principio de la crisis: todo a Bitcoin y “long-short, short-long”.
Hay testimonios en la causa de Córdoba que comprometen a Retamozo en maniobras para limpiar de pruebas la sede de “Adhemar Capital” antes de los allanamientos. Fernando “Nano” Gorocito, un policía retirado al que le habría encomendado el operativo, será juzgado por ese encubrimiento.
El abogado de Bacchiani fue denunciado también por instigar manifestaciones en contra de Contreras y el fiscal federal Santos Reynoso, quien se oponía a otorgar las domiciliarias solicitadas por el «trader».
Hay testimonios en la causa de Córdoba que comprometen a «Morla» Retamozo en maniobras para limpiar de pruebas la sede de “Adhemar Capital”. Fernando “Nano” Gorocito, un policía retirado al que le habría encomendado el operativo, será juzgado por ese encubrimiento
El laberinto recursivo
Ahora Contreras decidió adoptar la “línea Argibay”. Declinó en la Justicia provincial de Catamarca la competencia en los delitos de estafa y asociación ilícita, al tiempo que procesó solo por intermediación financiera sin autorización a Bacchiani, José Blas, Alexis Sarroca, la gerente de la sucursal de la firma en Tucumán Sofía Aylán, su socia y ex pareja Celeste Zaraive Garcés Rusa y el contador Iván Segovia, con embargos por un total de 800 millones de pesos. No encontró elementos que configuraran el lavado de activos.
La sentencia anticipa lo que podría pasar con las otras seis causas por criptoestafas piramidales que tiene en sus manos y prefigura un rumbo sinuoso para los expedientes, análogo al que comienza a seguir el de RT Inversiones.
El fiscal de Instrucción Marcelo Maturano rechazó las actuaciones giradas por Argibay y el juez de Garantías Marcelo Sago le dio la razón, con el argumento de que el procesamiento a los miembros del clan liderado por Edgardo Bulacio, también solo por intermediación financiera no autorizada, fue apelado tanto por la Fiscalía Federal como por las partes y todavía no está firme. Por tanto, hasta que la Cámara Federal de Tucumán se expida, entienden que el juez continúa siendo Argibay.
Mientras Contreras resolvía los planteos dilatorios de la dupla Retamozo-Aydar en el expediente Bacchiani, Argibay presionaba y conseguía que varios encartados ofrecieran detalles de las operatorias fraudulentas en RT Inversiones
La similitud de las sentencias federales no alcanza a disimular una diferencia medular entre las gestiones de Contreras y Argibay.
Mientras el catamarqueño resolvía los planteos dilatorios de la dupla Retamozo-Aydar, el santiagueño presionaba y conseguía que varios encartados ofrecieran detalles de las operatorias fraudulentas en RT Inversiones. Los más resonantes: Edgardo Bulacio padre se llevaba dinero en efectivo en bolsos de la sucursal de la firma, había retenido durante dos meses las recaudaciones de Pago Fácil y disponía en febrero, cuando el ecosistema cripto entró en el colapso de la cesación de pagos, de casi 60 millones de dólares para solventar sus compromisos.
Estafa clavada.
Ver también en El Estaño
https://elestanio.com.ar/bacchiani-puso-en-jaque-al-fuero-federal/
https://elestanio.com.ar/morla-retamozo-de-los-rolling-al-encubrimiento/
